El consejo de administración de El Corte Inglés se queda sin históricos. Florencio Lasaga, consejero del grupo de grandes almacenes desde 1969, presentó el martes su dimisión ante el máximo órgano de gobierno, como adelantó este jueves Hispanidad. Tras la marcha en noviembre pasado de Carlos Martínez Echavarría se queda sin ninguna de las figuras que acompañaron al histórico presidente Isidoro Álvarez al frente del grupo.
Lasaga, de 87 años de edad, renovó su mandato como consejero en la junta general de accionistas de 2019, en un momento de cambio en la presidencia del grupo, a la que accedió Marta Álvarez sustituyendo a Jesús Nuño de la Rosa. El mandato tenía una duración de cinco años, pero el veterano directivo ha decidido poner punto y final de forma anticipada a su presencia en el consejo. Este también dejó la presidencia de la Fundación Ramón Areces, primer accionista del grupo, el mes pasado, siendo sustituido por la propia Marta Álvarez, Sin embargo, Lasaga se mantendrá en la misma como patrono.
Este, nacido en la localidad navarra de Oieregi, ha estado vinculado a El Corte Inglés desde 1959, un total de 62 años, cuando todavía era presidente del grupo el fundador César Rodríguez. Ya desde entonces estaba ubicado en puestos de dirección, cuando apenas contaba 25 años. Durante la década siguiente la compañía comenzaría su expansión por toda España, y Lasaga se convertiría en figura ejecutiva clave que ha conocido a todos los presidentes que han pasado por la compañía: el mencionado César Rodríguez hasta 1966; Ramón Areces hasta 1989; Isidoro Álvarez hasta 2014, de quien sería el más estrecho colaborador junto a Juan Hermoso y Carlos Martínez Echavarría; Dimas Gimeno hasta 2018; Jesús Nuño de la Rosa hasta 2019; y desde entonces Marta Álvarez.
Lasaga ha sido una figura esencial dentro del organigrama de El Corte Inglés. Aunque nunca llegó a sentarse en el sillón de la presidencia, acumuló durante estas últimas décadas un gran poder dentro del grupo, tanto internamente como sobre el papel: ha figurado como presidente, consejero, administrador o cualquier otro puesto societario en prácticamente todas las filiales que han compuesto el grupo El Corte Inglés.
También lo fue durante el periodo de mayor inestabilidad para la compañía, cuando en 2018 el entonces presidente, Dimas Gimeno, y las hermanas Marta y Cristina Álvarez, hijas de Isidoro Álvarez, vivieron un fuerte enfrentamiento por el poder del grupo, que se saldó con la salida del primero. Para comprender el papel de Lasaga en este episodio hay que remontarse a septiembre de 2014, cuando la Fundación Ramón Areces le nombró presidente tras la muerte de Isidoro Álvarez. Un puesto que históricamente estaba reservado a los presidentes de El Corte Inglés, en tanto que esta fundación es la primera accionista del grupo. Pero esto no se continuó con Dimas Gimeno y Lasaga se mantuvo al frente de la misma, justo en el momento en el que Marta y Cristina Álvarez entraron, además, en su patronato.
Cuando explotó la guerra familiar, el octogenario directivo apoyó a las hermanas Álvarez y la salida de Gimeno, e impulsó la llegada de Jesús Nuño de la Rosa como un presidente que pacificase el grupo hasta que, un año después, tomó el puesto Marta Álvarez.